La importancia de los datos para el mejoramiento de las condiciones habilitantes y la creación de oportunidades
Por: Melissa Penagos | Cofundadora y Directora de Innovación & Marketing de Bee Data
¿Cómo sería el mundo, nuestro entorno y nuestra vida diaria sin datos? Es posible que no tuviéramos consciencia del tiempo, de la cantidad de ingredientes que se requieren para hacer una receta e incluso, si nuestros vehículos necesitan más gasolina. Desde un plano empresarial, no sería posible conocer la inversión inicial para crear un negocio, la cantidad de empleados que se necesitan para llevar a cabo un proyecto y la generación de valor de dicha empresa para la sociedad en general.
De acuerdo con el Banco Mundial “los datos son la base para la formulación de políticas significativas, la asignación eficiente de recursos y la prestación eficaz de servicios públicos” (Banco Mundial, 2019). Además, a medida que en un territorio se recopila información precisa y representativa, aumenta la capacidad de tomar decisiones para mejorar la calidad de vida de las personas desde las diversas perspectivas sociales y económicas.
Comprendiendo lo anterior, es posible evidenciar la alta brecha de desigualdad entre los territorios “medidos” y los “no medidos”, pues al contar con datos, se facilita la identificación de los problemas que enfrentan las comunidades en dichos territorios y, por ende, los beneficios son para todos, pues, desde el punto de vista de los ciudadanos, se puede comprender mejor el estado actual de la población, sus necesidades, deseos y obstáculos para el desarrollo; para las empresas y la economía en general, brinda una mayor transparencia que ayuda a identificar nuevas oportunidades comerciales, generación de grupos de trabajo y por ende un fortalecimiento del tejido social a nivel local, regional y nacional y, a nivel gubernamental, aumenta la confianza con todos los actores interesados.
Para lograr el escenario anterior, es necesaria la participación de todos, pues al involucrarnos desde el entendimiento de los datos, el aprendizaje que este implica, la identificación de indicadores claves y sus acciones correspondientes, es posible la dinamización del entorno social, económico, cultural, etc.; lo cual, facilita mejorar de manera colectiva las condiciones habilitantes del lugar en donde vivimos.
Es por tanto, imprescindible medir, recopilar y analizar los datos entre todos para comprender mejor la realidad que nos rodea, identificar qué podemos mejorar y tomar mejores decisiones basadas en datos que transformen y creen oportunidades en nuestra región y comunidad en general.